Los tres goles que recibió en la visita a México fueron letales, más allá de la vuelta de Santiago Silva, de ser un gran equipo, uno de los candidatos a ganar el título, ser local y de aplastar a su rival, Vélez no pudo...
El gol tempranero que convirtió Silva, le dio muchísima esperanza, los dirigidos por Gareca nunca se desesperaron, fueron, fueron y fueron, y encontraron...pero no al gol, sino a un arquero que no paró de sacar balones imposibles.
Zárate convirtió con un salto Jordanesco y puso la gloria a un sólo gol, a falta de 6 minutos para el final más el descuento, Liniers enloqueció, eran 19 jugadores en el área de "Chivas" y Vélez que seguía yendo, tuvo algunas oportunidades más pero el partido tenía que terminar con el arquero visitante como figura.
Para destacar, los aplausos con los que la hinchada local despidió a su equipo.
Foto: Google.
Por N.S.
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